No necesitas viajar muy lejos para tener una experiencia espiritual; puedes enriquecer tu alma recorriendo Bolivia
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Escrito
por Pablo Favio López Zuleta
Algunas
de las historias más antiguas que se conservan, tratan de grandes travesías que
realizan personas para conectarse con lo sobrenatural y encontrar conocimiento,
ya sea interno o externo. Conocer a los filósofos griegos, los sabios del
Himalaya, los profetas del oriente medio, los chamanes africanos y otras
personas iluminadas fue por miles de años la motivación para que algunos
emprendan viajes de años que cambian sus vidas. Bolivia aún conserva un poco de
esa sabiduría ancestral.
Imagen de chesterphotography en Pixabay |
Novedades y noticias del
mundo del turismo y la hotelería
Todos
tenemos razones distintas para viajar, pero sin duda una de las mejores es para
ampliar el conocimiento; no se necesita ser crédulo para abrir la mente a nuevas
cosas, distinta cosmovisión y ser más empático que materialista. Muchos pseudo
científicos no valoran la información que aporta la religión, la medicina
naturalista, la astrología y otras prácticas consideradas eficientes en la
antigüedad; pero cada vez más personas redescubren prácticas ancestrales que
son la respuesta que buscaban muchos en la actualidad.
La
arqueología moderna nos permite conocer algo sobre cómo eran los pueblos
originarios bolivianos, cada vez más información sale a la luz sobre las
conexiones americanas y mundiales antes de la colonización europea; similitudes
en las técnicas de arquitectura son notorias e impresionantes, pero lo son más
las similitudes culturales en temas rituales. Son tan impresionantes las
similitudes que algunos se atreven a decir que los Andes son la Atlántida, el
aimara la lengua de Adán y la historia de la civilización miles de años más
antigua de lo que se creía.
Bolivia
tiene una riqueza increíblemente variada en prácticas de la índole espiritual,
la mayoría es una mescla de la tradición de los pueblos originarios con las
practicas católicas. Existen muchas historias regionales que vuelven cada
municipio un lugar único en prácticas espirituales, algunas pueden asemejarse
más que otras a las que se practicaban hace miles de años; lo más común es la
adoración a los santos, los cuales son en mayor o menor medida las mismas
deidades que conocían las personas originarias.
En
algunos lugares siguen existiendo sabios ancestrales, los cuales a menudo
conocen el idioma español y algunas prácticas globalizadas. Son guías
espirituales conectados con ellos mismos y el universo; algunos chamanes de la
amazonia, Kallawayas de los Andes y sabios de las 36 naciones originarias
bolivianas, son conocedores de los viajes astrales, los cuales suelen
realizarse con ayuda de plantas espirituosas y en días específicos del año.
Existen
varias personas que ofertan este tipo de viajes, pero hay que tener especial
cuidado de los charlatanes, por lo que si te interesa este tipo de experiencias
debes contactarte con guías de turismo especializados y/o profesionales en
medicina natural y prácticas ancestrales.
No
necesitas ir a la India y conocer a los monjes budistas para tener una
experiencia espiritual; puedes enriquecer tu espíritu recorriendo Bolivia.
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